Apariencias vs realidades.

 

Texto Base. S. Marcos 11:12-13.

“Al día siguiente, cuando salieron de Betania, tuvo hambre. Y viendo a lo lejos una higuera que tenía hojas, fue a ver si tal vez hallaba en ella algo; pero cuando llegó a ella, nada halló sino hojas, pues no era tiempo de higos. Entonces Jesús dijo a la higuera: ¡Nunca jamás coma nadie fruto de ti! Y lo oyeron sus discípulos. ”

La historia de la higuera sin fruto conlleva un profundo mensaje para nuestros nuestras vidas, la historia Bíblica dice que Jesús vio una higuera que tenía muchas hojas pero al acercarse a ella no encontró nada sino solo hojas. Cuando uno lee esta porción de las escrituras a simple vista no entiende mucho lo que sucedió ni su significado, es por eso que debemos entender el significado de esta historia. En el tiempo de Jesús y hasta nuestros días una higuera con muchas hojas es símbolo de un higuera con mucho fruto, eso quiere decir que cuando Jesús y los discípulos se acercaron a esta higuera frondosa esperaron encontrar un gran fruto en ella, pero para su sorpresa solo encontraron hojas. 

Sabes en esta vida como seguidor de Jesús existen dos cosas muy tristes, una es no tener frutos, pero otra mas triste es aparentar tener un fruto que en realidad no tienes, ese fue el error de la higuera, ella aparentaba tener un fruto que en realidad no poseía y cuando Jesús se acercó descubrió la verdad y esta higuera fue maldita y nunca más nadie comió fruto de ella. Mi pregunta en esta mañana es: ¿si Jesús se acercara hoy a tu vida que encontraría? Quizás muchos frutos y se gozaría o quizá solo encuentre hojas y tú serias avergonzado. Cuando Jesús estuvo en esta tierra el peleo contra la hipocresía una y otra vez, a los religiosos de ese tiempo les decía sepulcros blanqueados, porque por fuera aparentaban santidad pero por dentro estaban perdidos en pecados, a otros les dijo hipócritas, ¿sabes por qué? Porque Él  no tolera la hipocresía, el conoce lo más profundo de nuestros corazón, por fuera podemos aparentar muchas cosas como esta higuera pero Él conoce la realidad de nuestras vidas, por fuera podemos aparentar espiritualidad y aun comunión intachable, sin embargo Jesús conoce nuestro corazón Él sabe que quizá hace mucho tiempo no pasas un largo tiempo en su presencia, Él sabe que quizá tu comunión con Dios se ha resumido a una oración de dos minutos en la mañana y uno en la noche y aun que tú aparentas ser un cristiano consagrado la verdad es que estas muy lejos de Jesús. Es por eso que Él hoy llama a la puerta de tu corazón y te extiende una invitación para abandonar la hipocresía, la apariencia y presentarte delante de Él con la seguridad que Él puede hacer por ti aquello que tú  mismo no eres capaz de hacer. Cuando Jesús se acercó a la higuera solo hallo hojas, dime si Jesús se acercara a ti en esta misma hora que hallaría. Antes de salir hoy a la calle habla con Dios cuéntale tu situación, si todo en ti está bien siéntete feliz y reten lo que tienes, sin embargo si hoy tu vida no es lo que debería ser pídele perdón y toma la decisión de retomar aquello que un día descuidaste. Recuerda tú y yo fuimos creados para ser Luz donde quiera que vayamos.

Dios te bendiga.